EJERCICIO 12

 

 He de decir que las tres experiencias que se narran me parecen tanto adecuadas como beneficiosas 

ya que dan pie a trabajar un gran número de aspectos pudiendo adaptarlos a la edad y las cualidades 

de los alumnos. 

De todas formas, la más diferente, original y completa diría que es la experiencia I, es decir, “mi vecino 

totoro”. Es verdad que se trata de un proyecto muy largo además de costoso pero los conceptos y 

aprendizajes obtenidos a cambio diría que son más que compensatorios. Además de trabajar objetivos 

totalmente vinculados con el currículum de educación infantil, interiorizan conceptos totalmente útiles 

para su día a día además de su futuro. Como he dicho anteriormente, también existe la opción de 

modificar los pasos que hay que seguir adelante en base a el nivel inicial del grupo y las diferentes 

actividades se pueden especializar a cada alumno haciendo así que nadie se sienta excluido. 

El hecho de presentar al final del proceso el trabajo antes los padres y las madres me parece también 

una idea brillante ya que de esta manera se da visibilidad a el trabajo que han llevado a cabo además 

de darle importancia. En conclusión, sin duda alguna se trata de un proyecto totalmente completo y 

adecuado el cual impulsa la autonomía y la iniciativa.